Necesidades básicas: sector primario

La Política Agraria Comunitaria es la principal partida presupuestaria europea (única política industrial hasta hace poco) congelada desde hace 20 años mientras que la ampliación europea ha continuado. Este presupuesto ha pasado de más de un 70% del total durante finales del siglo pasado al 23,4% para el último periodo aprobado (2021-2027). En cualquier caso, estamos hablando de la friolera de 264.024 millones de euros destinados en su mayor parte a pagos directos a los empresarios agrícolas y medidas de mercado (primer pilar: 77%) y el resto para desarrollo rural (sectores secundario y terciario rurales). Este ingente esfuerzo presupuestario y normativo tiene como objetivo inicial la seguridad alimentaria de Europa, el abastecimiento de alimentos baratos para una urbanización galopante (y por consiguiente despoblamiento rural) y por último la gestión de los territorios rurales.

Paralelamente se ha roto la estructura comercial territorializada de alimentos hacia un modelo de oligopolio por parte de las grandes distribuidoras minoristas. Su debacle fruto de un colapso supondría un desabastecimiento generalizado con especial incidencia en los núcleos urbanos. Pareja a esta posible ruptura de las cadenas de suministros, la disminución de la productividad agrícola y ganadera debido al cambio climático, el incremento de los precios de los alimentos, etc. nos puede llevar a un escenario complejo en el que ni la Unión Europea ni los estados miembros van a poder garantizar las necesidades básicas de alimentación.

Bajo este posible escenario, es pertinente que sindicalismo alternativo y los movimientos sociales autónomos se planteen si es posible colaborar en la puesta en marcha de proyectos de producción local que mitiguen parcial o totalmente las necesidades alimentarias de la población, al tiempo que se potencia la recuperación de los saberes agrícolas tradicionales y el conocimiento más puntero para un ejercicio autónomo de autogestión del alimento.

Por la parte de la demanda de alimento, debemos ser conscientes de la dieta. El alimento es materia que nuestro cuerpo transforma en nutrientes y energía (ATPasas) necesarias para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Pero ¿qué dieta es la más saludable? Y ¿qué dieta es la más ética? No poseen la misma respuesta dado el debate introducido por el vegetarianismo y el veganismo, así como el estilo de vida (deportiva vs sedentaria, alergias, etc.) y la presión ejercida sobre el medio. Por ejemplo, según el sistema empleado, la carne de vacuno necesita entre 16.140 y 10.922 metros cúbicos de agua potable por tonelada, mientras que la carne de pollo necesita entre 4.695 y 1.940, y de huevo entre 3.952 y 2.086. Las dietas vegetarianas y veganas implican un impacto mucho menor en el medio, tal como se expone en la siguiente figura [1]:

Como punto de transición hacia la sostenibilidad nutricional y con el ecosistema, y dada la cultura presente en la península ibérica, una opción podría ser la dieta mediterránea, caracterizada en la isla griega de Creta en la década de 1960 [2], cuando la incidencia de enfermedades coronarias y mortalidad eran bajas. Baja en carne roja (media de 35 g/día) y basada principalmente en cereales y leguminosas, y el aceite de oliva como principal aporte de grasas (~40% de la energía aportada). La siguiente figura [3] muestra la pirámide de esta dieta.

Para que la producción sea capaz de satisfacer la demanda de alimentos, es necesario disponer de tierra y agua en primer lugar. Existen experiencias consolidadas en países de nuestro entorno, como son en Francia, Terre de Liens [4], cuyos objetivos son “liberar la tierra de la especulación inmobiliaria, promover el acceso a la tierra para los agricultores, promover proyectos ciudadanos para revitalizar las zonas rurales y apoyar el medio ambiente”, o las AMAPS [5] (Asociaciones para el Mantenimiento de una Agricultura Campesina) que con casi dos décadas de experiencia “promueven una alianza entre consumidores y agricultores”. O el colectivo Antidote [6] centrado en la puesta en marcha de “fondos de dotación” que permitan sacar del mercado granjas, talleres, viviendas o espacios culturales, para ponerlos en funcionamiento colectivo. Todas ellas permiten establecer formas de comercio directo, conservar la calidad del alimento, evitar los desperdicios y reducir la huella de carbono.

¿Cómo puede el sindicalismo alternativo colaborar para aportar recursos de producción a los proyectos de locales de base rural normalmente con poca masa crítica?

¿Cómo establecer alianzas con productores locales para apoyar o crear redes de distribución alternativas al mercado?

¿Qué criterios de producción, distribución y consumo deben prevalecer o premiarse?

Referencias:

  1. D. Vanham, M.M. Mekonnen, A.Y. Hoekstra, The water footprint of the EU for different diets, Ecological Indicators, Volume 32, 2013, Pages 1-8, ISSN 1470-160X, https://doi.org/10.1016/j.ecolind.2013.02.020 .
  2. Food in the Anthropocene: the EAT–Lancet Commission on healthy diets from sustainable food systems (2019). Walter Willett, Johan Rockström, Brent Loken, Marco Springmann, Tim Lang, Sonja Vermeulen, Tara Garnett, David Tilman, Fabrice DeClerck, Amanda Wood, Malin Jonell, Michael Clark, Line J Gordon, Jessica Fanzo, Corinna Hawkes, Rami Zurayk, Juan A Rivera, Wim De Vries, Lindiwe Majele Sibanda, Ashkan Afshin, Abhishek Chaudhary, Mario Herrero, Rina Agustina, Francesco Branca, Anna Lartey, Shenggen Fan, Beatrice Crona, Elizabeth Fox, Victoria Bignet, Max Troell, Therese Lindahl, Sudhvir Singh, Sarah E Cornell, K Srinath Reddy, Sunita Narain, Sania Nishtar, Christopher J L Murray, https://doi.org/10.1016/S0140-6736(18)31788-4
  3. Willett, W. C., Sacks, F., Trichopoulou, A., Drescher, G., Ferro-Luzzi, A., Helsing, E., & Trichopoulos, D. (1995). Mediterranean diet pyramid: a cultural model for healthy eating. The American Journal of Clinical Nutrition, 61(6), 1402S–1406S. https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0002916523188514
  4. https://terredeliens.org
  5. https://reseau-amap.org
  6. https://lafonciereantidote.org